
El regreso de una variante que afecta a adultos y adultos jóvenes
En la península de Yucatán, la influenza ha dejado de ser una enfermedad exclusiva del invierno. Este 2025, los contagios han mostrado un comportamiento distinto, con mayor incidencia entre adultos y adultos jóvenes de entre 30 y 45 años, según explicó el médico internista Juan Pablo del Campo.
“Este año ha tomado mayor relevancia la influenza por un cambio en el comportamiento de las variantes que circulan. El año pasado predominó la AH3N2, pero ahora vemos una presencia más fuerte de la AH1N1, que es más contagiosa y puede causar cuadros más severos”, señaló.
El especialista detalló que la influenza AH1N1 tiende a generar síntomas respiratorios más intensos, acompañados en ocasiones de diarrea o vómito, mientras que la AH3N2 se manifiesta con fiebre alta y dolores musculares generalizados.
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“Lo que estamos viendo en la práctica es que la AH1N1 se transmite con mucha facilidad, especialmente en espacios cerrados como escuelas o transporte público. Por eso afecta más a personas activas laboralmente o con una vida social más dinámica”, explicó.
El comportamiento de esta cepa también ha sorprendido a los médicos por su capacidad de propagarse fuera de la temporada fría.
“La AH1N1 no distingue entre calor o frío. Se ha adaptado al clima de la región y por eso la estamos viendo incluso en los meses más calurosos”, mencionó.
El internista explicó que las condiciones de humedad y los cambios bruscos de temperatura son factores que favorecen la propagación del virus.
“Pasamos del aire acondicionado a los 35 grados de la calle, y ese contraste debilita las vías respiratorias, haciéndolas más vulnerables. Si además sumamos el sudor, el contacto con superficies y la falta de higiene de manos, el riesgo se multiplica”, advirtió.
Contagio silencioso en los hogares
Aunque los casos no son alarmantes ni representan una situación de emergencia sanitaria, el médico hizo un llamado a no minimizar la enfermedad.
“Los adultos jóvenes son los que más se contagian, pero muchas veces son también quienes llevan el virus a casa. Si viven con adultos mayores o personas con defensas bajas, el riesgo aumenta considerablemente”, alertó.
Del Campo explicó que la influenza puede pasar desapercibida en sus primeras etapas, con síntomas parecidos a un resfriado común. Sin embargo, la infección puede complicarse si no se guarda reposo o si el paciente pertenece a un grupo vulnerable.
En ese sentido, el especialista enfatizó la importancia de mantener los cuidados preventivos todo el año sobre todo en los grupos que pueden ser más vulnerables al contagio.
“La vacunación sigue siendo la herramienta más efectiva para evitar cuadros graves. También es fundamental lavarse las manos constantemente y usar cubrebocas en lugares concurridos o con poca ventilación”, recomendó.